En Veracruz se usa para decir que alguien está poniendo mucha atención a lo que se dice, casi siempre a un chisme sabroso o a una conversación ajena. Es como afinar el oído para no perder detalle de lo que está pasando alrededor. Suena inocente, pero todos sabemos que el chismecito jarocho tiene su encanto inevitable.
"Estábamos en la fonda echando el desayuno y en la mesa de al lado empezaron a pelear por una herencia. Nomás vi que la doña dejó de mover el café para parar la oreja y no perderse ni una sola mentada."
Expresión campechana para decir que alguien se pone bien atento a escuchar, sobre todo cuando huele a chisme sabroso o a plática curiosa. Es como afinar la antena para no perder detalle de lo que se está diciendo. Suena inocente, pero todos sabemos que el chismecito entra mejor cuando uno para bien la oreja.
"Nomás oí que dijeron mi nombre en la cocina y paré la oreja, porque con esa bola de chismosos seguro ya me andaban inventando novio nuevo"
Se usa para decir que alguien pone mucha atención a lo que se está hablando, como afinando la antena para no perderse ni una. Es típica cuando hay cahuín, chisme sabroso o info que uno no debería estar escuchando, pero igual se queda piolita parando la oreja. Y hay que admitir que es una expresión bien gráfica.
"Estábamos en la micro y escuché que nombraron a mi ex, así que paré la oreja al tiro pa' cachar el cahuín completo antes de bajarme en mi parada."
Escuchar disimuladamente cuando todos creen que estás desconectado, pero en realidad tu modo 'satélite cotilla' está activado. Ideal para enterarse sin levantar sospechas.
"Mientras hacía ver que estaba jugando Candy Crush en mi móvil, paré la oreja y descubrí el nuevo amorío secreto de Laia."
Se usa cuando alguien pone muchísima atención a lo que se está diciendo, sobre todo si huele a chisme sabroso o a secreto jugoso. Es como activar el modo antena parabólica y no perderte ni una sola palabra. La neta, es de esos reflejos automáticos cuando escuchas tu nombre o el del vecino incómodo.
"Yo bien tranquila viendo la novela y en eso oigo que mi tía dice mi nombre en la cocina, así que paré la oreja en corto porque seguro ya traían el chisme fresco."
Se usa cuando alguien está poniendo mucha atención a una conversación, sobre todo si no es asunto suyo y anda medio sapo. Es como afinar el oído para cachar el cahuín, ya sea en el metro, en la pega o en la casa. No es tan grave, pero igual tiene ese sabor a copuchento profesional que da un poco de risa.
"Estábamos pelando al profe en el recreo y el inspector atrás, parando la oreja más que antena de radio vieja, listo para puro sapearnos"
Se usa para decir que alguien presta atención o está atento, especialmente cuando está husmeando en conversaciones ajenas.
"Estábamos hablando del asado y Juan paró la oreja desde el otro lado de la cancha, ¡qué chismoso!"
Se usa cuando alguien empieza a escuchar con mucha atención, casi al chisme profesional, para no perderse ni una palabra. Es como afinar el oído porque algo interesante, raro o jugoso se está diciendo. Suena muy de calle y tiene ese toque de curiosidad metiche que, seamos sinceros, casi todo el mundo tiene.
"Apenas escuché que la vecina dijo tengo que contarte algo fuerte, paré la oreja al toque y hasta bajé el volumen de la tele para no perderme ni un chisme."
Se usa cuando alguien se pone bien atento a lo que se está diciendo, casi siempre porque huele a cahuín rico o a secreto sabroso. Es como afinar la antena para no perderse ni una palabra. No es solo escuchar, es escuchar con ganas, con malicia buena y con curiosidad chismosa.
"Estábamos en la micro piola y de repente escuché que la señora de adelante nombró a la vecina del pasaje, así que paré la oreja al tiro, porque cuando esas viejas se ponen a pelar, sale cada cahuín más jugoso que sopaipilla pasada con pebre."
Significa estar muy atento a lo que se dice, afinar el oído para no perderse ningún chisme ni detalle sabroso de la conversación. Es como activar el modo espía del salseo cuando algo interesante se está cocinando cerca. Se usa mucho cuando uno se hace el loco, pero en realidad está escuchando todo clarito.
"Yo estaba haciendo que barría el patio, pero cuando oí que la suegra llegó arrecha, paré la oreja de una para no perderme el novelón familiar."