Se dice cuando alguien está pasando por un mal momento, sin dinero o con mala suerte. Literalmente, en una racha negativa.
"¡Uy, parcero! Este mes estoy en la mala: el negocio no anda y ayer hasta perdí la billetera."
Expresión para cuando estás pasando una racha bien salada, de esas en las que todo se complica y la vida parece novela barata. No hay plata, las cosas se dañan, te llueve hasta dentro del bus y sientes que el universo te tiene en la mira. Es como decir que estás en la mala vibra total, pero con sabor colombiano.
"Parce, desde que me echaron del camello estoy en la mala: me cortaron el internet, se dañó la nevera, me dejó la novia y hasta el TransMilenio me pasa de largo."
Se dice cuando alguien está pasando por una racha de mala suerte y todo le sale mal.
"Parce, desde que se me pinchó la bici estoy en la mala: perdí el bus y hasta el perro se comió mis deberes."
En Jujuy se dice estar en la mala cuando alguien la está pasando feo, con mala racha, sin un mango o hecho bolsa por la resaca. Sirve tanto para quilombos económicos como emocionales, cuando todo sale torcido y uno siente que el universo le está pegando patadas. Es bastante dramática, pero hay que admitir que tiene su encanto tanguero.
"Entre la resaca de anoche, que me quedé sin un peso y encima me dejó mi ex, estoy en la mala mal, ni ganas de salir a comprar unas empanadas jujeñas."
Cuando andas con mala suerte o los planes no salen como uno quiere, a veces hasta te sientes una nube negra caminante.
"Oye, desde que se me perdió el celular, estoy en la mala. Hasta me llevé un charco de agua hoy."