Se refiere a alguien que, después de una noche de excesos, cuenta historias inverosímiles de cómo amaneció completamente roto, creando leyendas urbanas durante las horas de borrachera.
"Salimos y despedazamos la discoteca; al día siguiente, Juan apareció sin un calcetín y con una pierna del pantalón hecha jirones: típico toditico fiestero. ¡Ahora se rumorea cómo perdió el zapato bailando en la fuente!"
Se utiliza para describir ese apetito voraz y a la vez meticuloso que hace que alguien no deje un solo grano de arroz en el plato, asegurándose de no desperdiciar nada mientras sigue con hambre.
"En la taquería Rodrigo normalmente pide diez tacos y todavía pasa su tortilla por todo lo que queda del guacamole; es nuestro toditico gourmet, nunca deja ni una gota."
Usado para describir algo en su totalidad o completamente, a menudo con un toque de exageración.
"Me comí toditico el pastel yo solo, ¡no dejé ni una migaja!"
Se usa para describir a alguien que, aunque tiene un poco de todo tipo de información dispersa y desorganizada en su cabeza, se las arregla para soltar un dato curioso inesperado en el mejor momento.
"Estábamos hablando del clima y María salió con una explicación del efecto invernadero tan elocuente... ¡Es la toditica de los datos curiosos!"
Diminutivo satírico usado para referirse al caos total cuando todo sale mal de golpe, pero sorprendentemente sigues sonriendo.
"Intenté preparar el almuerzo y ya ves, tiré la leche, se quemó el arroz... fue un toditico desastre, ¡pero al menos el perro se lo pasó bomba!"
Se usa para referirse a una persona que se las sabe todas, aunque normalmente no quería tantas responsabilidades.
"Desde que se recibió de ingeniero en informática, ahora Pedrito es el toditico del barrio; lo llaman hasta para arreglar electrodomésticos."
Forma muy cariñosa y exagerada de decir todo, típica del habla venezolana cuando quieres remarcar que no quedó absolutamente nada. Se usa para presumir un poco, para hacer drama o para sonar más dulce y juguetón. Es como decir que arrasaste con todo, sin dejar ni las migas, y la verdad es que suena bien sabroso.
"Hermano, dejé la nevera toditica limpia, no quedó ni un pedacito de queso, ahora mi mamá va a pegar el grito en el cielo cuando llegue del mercado."