Montar una fiesta épica donde sobran las risas, el desmadre y nadie se queda quieto. Si no tiene cumbias y taco pa'l rato, no es pachanga.
"Güey, en mi casa el viernes armamos la pachanga. Trae a todos los compas, va a ser un desmadre total."
Montar una fiesta épica donde nadie falte y el desmadre esté asegurado. Básicamente, hacer que el relajo sea inolvidable.
"Este fin le armamos la pachanga en casa de Toño, ¡va a estar hasta la abuela del mariachi!"
Cuando decides hacer una reunión o fiesta que empieza tranqui pero seguro acaba en desmadre total, con banda y cervezas de por medio.
"Este fin vamos a armar la pachanga en casa del Toño, así que ve afinando la voz pa'l karaoke."
Frase que se utiliza cuando alguien está planeando una fiesta con mucho desmadre, música y un buen ambiente. Es el arte de organizar el jolgorio perfecto.
"Este fin, el Juan va a armar la pachanga en su cantón, ¡va a estar de lujo!"
Significa organizar una fiesta épica, con toda la buena vibra jarocha. ¡Más grande que un cumpleaños y más loco que cualquier reunión familiar!
"Ya le dije a mis compas que este sábado vamos a armar la pachanga en mi casa; ¡prepárense para bailar hasta el amanecer!"
Se usa para decir que se va a organizar una fiesta con todo el desmadre posible, música, baile, mezcal y chisme sabroso. No es cualquier reunión aburrida, es de esas pachangas que acaban en anécdotas legendarias y fotos borrosas. Y la neta, si no hay quien arme la pachanga, la vida se pone bien gris.
"Mira, ya cobraron la quincena, hay mezcal, banda y patio libre, así que hoy se arma la pachanga hasta que los vecinos vengan a pedir invitación en vez de quejarse."
Montar una fiesta épica, llena de diversión, música y sabrosura al estilo caribeño. Donde el objetivo es olvidar los líos y pasarlo a lo grande.
"¡Vamos a casa de Juan este sábado! Va a armar la pachanga con mariachis y tacos para todos."