Frase súper mexicana que se usa para expresar sorpresa, incredulidad o molestia, según el tono. Puede ser algo bueno o malo, como decir no te creo o no exageres, pero en versión grosera y con más sabor. Es muy de cuates y de calle, mejor no usarla con la tía persinada o en una junta formal.
"No mames, güey, si ayer no podías ni correr y hoy metiste tres goles, ya pareces Cristiano del tianguis."
Expresión utilizada para expresar sorpresa o incredulidad ante algo increíble o inesperado.
"¡No mames! ¿De verdad Juan se fue a trabajar en pijama?"
Expresión utilizada para mostrar sorpresa, incredulidad o molestia. También puede usarse para alertar a amigos sobre una situación inesperada.
"¡No mames! Ahí viene el profe de mate, mejor vámonos por otro pasillo."
Se usa para expresar sorpresa o incredulidad ante algo increíble o absurdo.
"¡No mames! ¿De verdad estás intentando bajar ese refri tú solo desde el quinto piso?"
Expresión utilizada para expresar sorpresa o incredulidad ante algo inesperado o impresionante.
"¡No mames! Paco arregló el Wi-Fi del vecino poniendo papel aluminio alrededor de su caja de zapatos. ¡Es un genio!"
Expresión utilizada para expresar sorpresa o incredulidad ante una situación inesperada o impresionante.
"No mames, Sarah acaba de romper el récord: ¡siete llantas ponchadas en una semana!"
Expresión utilizada para expresar sorpresa, incredulidad o molestia ante una situación inesperada o decepcionante.
"No mames, pensé que tenía pase VIP para el concierto y terminé esperando tres horas. ¡Vaya chasco!"
Se utiliza para expresar incredulidad o sorpresa ante algo que parece increíble o exagerado.
"¡No mames, güey! ¿De verdad te ganaste la lotería? Eso está de locos."
Expresión utilizada para expresar incredulidad o sorpresa ante algo improbable o difícil de creer.
"¡No mames! Pedro cree que va a arreglar su coche solo con cinta adhesiva y buena vibra."
Expresión utilizada para expresar sorpresa o incredulidad, especialmente cuando algo es excesivamente caro o inesperado.
"¡No mames! Pedí un tamal y una chela, y casi tengo que hipotecar la casa. ¡Esto de ser turista es caro!"