Es el término nica para referirse a cometer un error garrafal, ese tipo de metida de pata que te deja en una situación cómica o embarazosa.

"¡No te puedo creer que jalaste cables en la reunión! Ahora todos piensan que eres el jefe de los chistes malos."

En el argot madrileño, se usa para describir el acto de disfrutar de un placer indulgente, como devorar una buena comida o ver compulsivamente una serie, de forma despreocupada.

"Ayer me jalé toda la temporada del tirón de esa nueva serie sin pestañear ni un segundo."

En Barranquilla, 'jalarse' se refiere a reaccionar de manera exagerada ante un estímulo insignificante, como si estar compitiendo en una telenovela dramática con épicas lágrimas y expresiones desmedidas.

"Cuando le dije a Marta que cancelaron la fiesta, se jaló de una manera cinematográfica: tiró el celular y lloró como si el mundo hubiera acabado."

'Jalarse' en Buenos Aires significa entusiasmarse en exceso por una idea loca que casi siempre termina en historias inolvidables y un montón de anécdotas graciosas con amigos.

"Nos jalamos mal y decidimos hacer un asado en el balcón del quinto piso. Ahora somos leyenda en todo Palermo."

'Jalarse' en la Ciudad de México significa convertir una simple salida, como ir a la tienda, en una gran aventura llena de historias y tiempo que pasa volando.

"Fui por unas tortillas y terminé jalándome con mi compadre hasta CU para ver unas jam sessions... llegué cuando ya recogían los puestos."

En Áncash se usa jalarse para decir que te llevas a alguien contigo a algún sitio, casi como arrastrarlo con cariño a un plan. Puede sonar medio pícaro, como cuando te jalas a tu causa o a tu flaca a una fiesta o a un tono. No es robar literal, es más bien enganchar a alguien para que se anime y vaya contigo.

"Oye, mañana hay tono en el barrio, me voy a jalar a Juana y a la gente de la chamba para que no se hagan los aburridos y caigan con todo"

En Cartagena, 'jalarse' significa colarse en una fiesta o evento con tanta gracia que los mismos organizadores creen que deberías estar allí, interpretando un nóbel arte de intrusión social llena de estilo y desparpajo.

"Anoche nos jalamos en el matrimonio del vecino. Para cuando se dieron cuenta, ya estábamos dando consejos matrimoniales junto a la banda del mariachi."

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