Expresión costeña para hablar de algo que uno cree que va a ser sencillo y rapidito, pero termina siendo un lío cansón, demorado y medio desesperante. Es como ver el coco ahí todo bonito y luego sudar la gota gorda para poder abrirlo. Y sí, da risa al principio, pero al rato provoca tirarlo por la ventana.
"Hermano, pensé que montar ese ventilador era una vaina e' coco y terminé bañado en sudor, con tres tornillos sobrando y el aparato sonando como mototaxi viejo."