En Paraguay se usa vaícho para hablar del típico chaval medio bandido, medio pícaro, que siempre anda en cosas turbias o con malas juntas. No necesariamente es un criminal, pero tiene pinta de problema andando. Es como decir que es un personaje poco confiable, medio malandrín, y que mejor no fiarse mucho de lo que haga.

"Che, ese pibe tiene toda la pinta de vaícho, en dos días ya está fumando por la esquina con los muchachos y metiéndote en cada quilombo que ni tu abuela te salva"

Tu cesta: 0,00 € (0 productos)
Imagen del producto

Tu Carrito de Magia

Tu carrito está vacío. ¡Adopta un Magikito!