Dejar de intentar algo porque ya te cansaste y no ves resultados, como cuando juegas chapitas y es mejor irte a buscar papelón.
"Chamo, después de tres horas arreglando el carrito sin éxito, decidimos tirar la toalla y nos fuimos por unas empanadas."
Significa rendirse o dejar de intentar después de muchos intentos fallidos.
"Chamo, después de pasarme cuatro horas intentando hacer funcionar ese bendito teléfono, tuve que tirar la toalla. Mejor me compré uno nuevo."
Significa rendirse o darse por vencido, como cuando ya no aguantás más y decidís dejarlo todo.
"Después de tres horas intentando arreglar el carro, Juan decidió tirar la toalla y llamar al mecánico."
Se usa cuando alguien se rinde, se cansa de pelearla o decide dejar un proyecto a medias porque ya no puede más. Viene del boxeo, cuando el entrenador lanza la toalla para parar la pelea. Es como decir basta ya, hasta aquí he llegado, aunque a veces da rabia admitirlo.
"Llevo tres suspensos seguidos, pero esta vez no voy a tirar la toalla, me encierro el finde con los apuntes y apruebo por mis muertos"
Usada cuando alguien se rinde o abandona una situación, similar a un boxeador que lanza la toalla en el ring.
"Después de tantos intentos fallidos para arreglar mi carro, creo que voy a tirar la toalla y llevarlo al mecánico."
Se usa cuando alguien se rinde, se cansa de pelearla o simplemente deja de insistir porque ya no le da más la paciencia. Viene de la imagen del boxeador reventado cuyo entrenador lanza la toalla para parar la pelea. Es muy común en Colombia y suena a derrota asumida, pero a veces también a alivio necesario.
"Llevaba tres horas peleando con el WiFi, reiniciando el módem y hablando con soporte, hasta que tiró la toalla, apagó el portátil y se fue a tomarse una pola con los parceros."