Se usa para hablar de alguien que promete el oro y el moro, vende sueños, se llena la boca hablando de planes épicos y al final no cumple nada. Mucho discurso, cero acción. Es como ese colega que siempre dice que va a cambiar de vida el lunes y llega el viernes igualito. Y hay que admitir que a veces da hasta risa.
"El Juanito juró que iba a llegar al carrete con asado, copete y DJ en vivo, y apareció solo con una bolsa de pan duro. Ese loco es una fábrica de humo brígida, puro verso y cero producción."