Se usa para rajar de alguien que siempre anda buscando acomodo, excusa o ventaja, como mandil de moza que se acomoda a todo lo que le echen. Es el típico pata que nunca asume nada, todo lo quiere fácil y siempre tiene un cuento listo para zafarse. Y hay que admitir que la frasecita tiene su gracia bien criolla.
"El Jorge otra vez no quiso ayudar a cargar las cajas, se hizo el loco y terminó sentado tomando gaseosa, bien acomoda'o como mandil de moza, mientras todos sudábamos la gota gorda."