En Córdoba se usa para decir que alguien quedó re perdido, confundido o medio atontado después de algo intenso, como si el cerebro se le hubiera chocado contra el tabique. Puede ser por una noche larga, un susto, un quilombo sentimental o simplemente por estar colgadísimo. No es técnico ni nada, es pura jerga cordobesa con mucha onda.
"Boludo, entre el fernet, los cuartetos y el drama con la ex, quedé tan tabiqueado que saludé al portero como si fuera el DJ del boliche"
Dícese de alguien que ha pasado toda la noche trasnochando, generalmente por amanecer en carrete o fiesta intensa y amanece con cara de zombi.
"Después del cumpleaños del Tito, llegué a la pega todo tabiqueado."