Se dice cuando alguien se toma la existencia con calma, sin hacerse bolas, disfrutando cada momento como si fuera una chela bien fría o un buen trago de tequila. Es vivir relajado, con filosofía de cantina, sin tanta ansiedad por el futuro. Y la neta, a veces sí hace falta pistearse la vida tantito.
"Mi ex anda todo estresado por la chamba y yo acá, pisteando la vida en el barecito del barrio, echando chela con los cuates y viendo qué se arma mañana."