Dícese de invitar o pagar la cuenta en una salida con los amigos. Un gesto generoso que siempre es bienvenido.
"¿Quién se anima a pichar los tacos hoy? ¡Ayer me tocó sacrificarme a mí, banda!"
En Bolivia, pichar es hacerse el desentendido para zafar de un problema, una bronca o alguna responsabilidad que no quieres ni ver. Es como activar el modo yo-no-fui y mirar para otro lado con toda la cara dura. Suena inocente, pero bien usado te salva de cada quilombo que da hasta risa.
"La profe pregunta quién rayó el pizarrón y el Kevin pichando fuerte, mirando al techo y silbando como si estuviera viendo ovnis en el recreo."