En Antioquia, parcero es el amigo del alma, el pana con el que se comparte todo, desde el sancocho del domingo hasta el chisme más fresco del barrio. Es el compa leal, el que está firme para el parche, la rumba o el problema. Eso sí, si juega Nacional, uno entiende que el parcero se pierda un ratico.

"Ey, parcero, caiga pues esta noche al barrio, armamos parche con música, billar, arepitas y de una nos cuadramos para el partido."

Es como tu pana o compa, pero en versión colombiana: ese amigazo que está pa' las que sea, en las buenas y en las malas.

"Claro parcero, si hay guaro de por medio, usted sabe que yo nunca me rajo."

Un colega, pana o amigo de aventuras que siempre te salva el día en Medellín. Sería raro no encontrarte uno solo por ahí.

"Oe parcero, vamos a tomarnos unas polas y ver el partido esta noche o qué pues."

Forma muy amistosa y callejera de referirse a un amigo, pana o conocido con buena vibra. Es como decir colega del alma, el que siempre está para el parche y las locuras. Se usa un montón en Colombia y suena tan cercano que hasta a desconocidos a veces les sueltan un parcero sin pensarlo mucho.

"Parce, si hoy no caes al parche donde la tía Julia con sancocho y pola fría, te me caes del combo pero de una."

Amigo o compañero de aventuras, siempre listo para lo que se venga, incluso para criticar al árbitro del partido.

"Oye, parcero, ¿te animas a ir por unas polas antes de ver el clásico cucuteño?"

En Colombia, parcero es como decir pana, llave o socio, es ese amigo del alma con quien se comparte chisme, fiesta, problemas y hasta la última empanada. Se usa tanto entre pelados como entre adultos y suena muy de barrio, muy cercano. Es casi un sello de confianza, aunque a veces el parcero sea más bueno para hablar que para ayudar.

"Parce, usted sí es mucho parcero, se vino hasta en bus repleto solo para ayudarme a empacar estas cajas, y de paso se trajo las arepitas pa' la merienda."

Es como decir 'amigo', pero con un saborcito paisa. Es el compadre que siempre está a las buenas y a las malas.

"¡Eh, parcero! ¿Nos vamos por unos fríjoles o qué? Hoy invito yo."

En Colombia se usa para hablar del amigo de confianza, el socio de aventuras, el que se sabe todos tus chismes y aun así te quiere. Es como decir pana o compa, pero con sabor bien paisa. Suena cercano, callejero y buena vibra. Y aceptémoslo, decir parcero siempre queda más bacano que amigo.

"Parce, usted sí es mucho parcero, se vino hasta el otro lado de la ciudad solo para ayudarme a mover ese sofá todo feo"

Amigo del alma, compinche de fechorías y pana para lo que se necesite. ¡Siempre listo para un sancocho o una vuelta!

"Ey parcero, ¿cuándo nos vamos a echar unas polas en el parque?"

Palabra muy usada en Colombia para referirse a un amigo cercano, colega de confianza o compañero de andanzas. Es como decir pana o compa, pero con sabor bien colombiano. Se usa tanto para saludar como para llamar la atención de alguien. Y hay que admitir que suena bastante pana y pegajosa.

"Parce, anoche te fuiste sin pagar la cuenta, casi nos toca lavar platos en la fonda, sos un peligro pero igual te quiero, parcero."

En Colombia se usa para hablar de un amigo muy cercano, casi hermano, ese con el que cuentas para todo, desde ir a la tienda hasta acompañarte en las locuras más absurdas. Es una forma muy cariñosa y callejera de decir colega o pana, y suena tan familiar que hasta alegra oírla.

"Ey, parcero, caiga esta noche al partido, traiga las polas bien frías que yo pongo la música y el desorden, va a estar una chimba."

En Antioquia, parcero es ese amigo del alma con el que cuentas para todo, desde un guayabo mortal hasta una vuelta rara a las tres de la mañana. Es como decir hermano, pero con todo el sabor paisa y más confianza que con medio combo de la cuadra. Y hay que admitir que suena bien bacano.

"Parcero, caiga pues a la casa con unas frías, que hoy parchamos suave y rajamos de todo el barrio hasta la madrugada."

Forma coloquial de referirse a un amigo cercano o compañero, alguien con quien compartes confianza y secretos.

"Ayer le conté al parcero que tengo un plan infalible pa' conquistar a la vecina."

Forma amigable y desenfadada de referirse a un amigo o colega. Es como decir 'bro', pero con más sabor colombiano.

"Oiga, parcero, lo espero pa'l partido esta tarde, ¡deje la flojera que esto estará bueno!"

Palabra usada en Colombia para referirse a un amigo o colega cercano, alguien con quien compartes todo. Es como decir 'bro' pero con más flow colombiano.

"Oiga parcero, ¿dónde está la rumba hoy? Que quiero bailar hasta que me duelan los pies."

El compinche, el confidente y socio para la vida. Decir parcero es como decir: 'en las buenas y en las malas... pero mejor si hay pizza'.

"¡Ea, parcero! ¿Vamos por una gaseosa para bajar la pizza?"

Amigo del alma, brother de la vida. Ese que te da la mano en las buenas y te jala las orejas en las malas.

"Oye, parcero, este fin de semana toca rumbear duro para sacudir el estrés."

Amigazo del alma, alguien con quien compartes buenos momentos y hasta el chisme. En Cali, un parcero es como un hermano de otra madre.

"¡Oe, parcero! ¿Qué más? Vamos por una lulada y luego cuadramos lo que vamos a hacer esta noche."

Amigo, pana, compinche de confianza. Alguien que está contigo en las buenas y las malas, hasta para hacer fila al banco.

"¡Ey, parcero! ¿Cómo vas? Vamos por unas polas después del trabajo."

Forma de llamar a tu amigo del alma, viene siendo como un 'brother' pero en versión caleña y con harto cariño.

"¡Qué más, parcero! ¿Nos vamos pa'l salsódromo esta noche o qué?"

Palabra que se usa para referirse a un amigo, alguien de confianza o simplemente para iniciar una conversación de buen rollo.

"¡Eh, parcero! ¿Vamos a ver ese video viral del perrito bailarín que dicen que está mejor que cualquier telenovela?"

Forma bacana de llamar a tu amigo o compañero con todo el cariño caleño, porque aquí todos somos parceros.

"Oiga, parcero, ¿cuándo es que vamos a hacer el sancocho en el río? No se me haga el joven ocupado."

Es como llamarle a alguien 'amigo' o 'hermano', pero al estilo colombiano, con saborcito local y toques de confianza infinita.

"¡Ey, parcero! ¿Nos pegamos la rodadita este finde o qué?"

Término coloquial para referirse a un amigo, muy usado en Colombia, similar a 'bro'.

"¡Eh, parcero! ¿Qué más? Este domingo armamos la ciclovía hasta Paipa, ¿o qué?"

Forma muy colombiana de llamar a un amigo cercano, casi hermano, con el que se comparte de todo, desde chisme hasta tragos y problemas serios. Es alguien de confianza, de la cuadra, con quien uno se siente en familia. Suena cálido, callejero y tiene ese saborcito de amistad sincera que no se rompe fácil.

"Parce, mi parcero, si hoy no me prestas para el bus me toca irme a pata hasta la casa y ya sabes que vivo lejísimos, casi en la punta del cerro"

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