En Corrientes se usa para decir que alguien se lanza a hacer algo sin pensar mucho, medio a lo kamikaze, confiando en que salga bien de puro caradura. Puede ser tomar una decisión re jugada, empezar un proyecto sin plan o simplemente dejarse llevar por el impulso. Y sí, a veces sale joya y a veces terminás empapado metafóricamente.
"Me ofrecieron irme a laburar a Ituzaingó mañana mismo y sin contrato, pero me mandé al río, armé el bolso en diez minutos y ya estoy arriba del micro, che."