En Colima se usa para hablar de alguien que se quiere zafar de un compromiso, se hace el desentendido o se escurre como jabón cuando toca responder. Es como darle la espalda a algo, pero con más maña y mala leche ligera. Suena fino, pero en el fondo todos sabemos que es pura evasiva con estilo.
"Eh, no le vayas a dar el dorso al plan de mañana, ya quedaste y luego sales con que tienes que bañar al perro del vecino."
Forma desenfadada de decir que alguien se echa para atrás en una situación, como quien dice 'mejor ya no le entro'.
"Iba a apostarle a los Rayados contra Tigres, pero mejor di el dorso. No andaba tan valiente después de todo."