Se usa para hablar de montar una fiesta grande, ruidosa y bien desordenada, donde todo el mundo baila, bebe y se olvida de la hora. Es de esas reuniones que empiezan tranquilas y terminan con los vecinos asomados a las ventanas. Básicamente es organizar un fiestón legendario, de esos que luego se cuentan por capítulos.
"Este finde vamos a armar un bonche en la casa de la playa, con picadera, ron barato, reguetón a to' lo que da y la vecina chismosa apuntando hasta quién se besa con quién."