En Panamá se usa para describir a alguien que se mueve todo raro, como desarmado, sin coordinación y medio ridículo. No es que tenga energía infinita, es más que parece muñeco flojo en licuadora. Se suelta para vacilar a la gente que baila o camina todo torcido, aunque a veces se dice con cariño burlón.
"Ey, viste a Carlitos saliendo del bar, iba caminando como sopa de muñeca, casi se come la acera frente a todo el mundo"