Se usa cuando alguien mete la pata feo en plena rumba, hace el ridículo o pasa una pena ajena mientras intenta lucirse. Puede ser bailando, echando cuento o tirándole a alguien y todo sale al revés. Es como combinar fiesta con cagada épica. Y sí, da pena, pero también da risa y queda para el chisme del día siguiente.
"Chamo, anoche en la rumba me rumbié un pelón bailando reguetón, me resbalé, tumbé los tragos y casi me llevo al DJ por delante, todo el mundo muerto de la risa."