Una expresión popular en Argentina para describir un desorden o caos gigantesco, como si hubieras puesto a bailar a todos los elefantes en una cristalería.
"¡Se armó un quilombo bárbaro cuando el loro de la tía Rosi se escapó en la fiesta!"
Se usa para hablar de un desorden tremendo, un caos total o un lío importante. También puede referirse a un problema serio, un conflicto o una situación complicada que nadie sabe bien cómo resolver.
"Entre las facturas, los apuntes y las cajas de la mudanza, mi pieza es un quilombo, no encuentro ni el cargador del celu."