Expresión muy murciana para mostrar sorpresa, asombro o incredulidad cuando pasa algo que no te esperas para nada. Sirve tanto para noticias buenas como para movidas raras que te dejan loco. Es como decir madre mía o no me lo puedo creer, pero con más mala leche y bastante más gracia.
"Tú, que ha salido el profe en la tele bailando bachata con un disfraz de plátano gigante... qué rabos, si este hombre no sabía ni dar palmas a compás"