Se dice cuando alguien aparece después de muchísimo tiempo sin dar señales de vida, como si fuera una aparición divina. Es una mezcla de sorpresa, burla cariñosa y reclamo suave por haberse perdido tanto. Muy típica cuando el compa desaparece meses y de repente cae como si nada. Y la neta, siempre saca risas.
"¡Qué milagro, compa! Ya pensé que te habían abducido los ovnis de Tlacolula, nunca te dejas caer por el barrio"