Expresión muy usada para decirle a alguien que espabile, que se apure o que esté bien atento. Es como un recordatorio cariñoso pero con presión, típico entre amigos, familia o incluso en el trabajo. En Nariño suena a regaño con cariño, de esos que te hacen moverte rápido aunque estés medio dormido.
"Ñaño, ya van a cerrar la ventanilla del banco, ¡pilas pues! Deje de mirar el celular y corra que después anda llorando sin plata."
Manera boyacense de decirle a alguien que esté atento o alerta. Se usa para dar un aviso serio o simplemente poner las pilas.
"A ver, mi chino, ¡pilas pues con esos exámenes! Que no quiero sorpresas después."
Expresión para avisar o recordar a alguien que esté atento o preparado, porque la situación se puede poner movida.
"Oye, Juancho, ¡pilas pues con la abuelita esta tarde, que ella no perdona un descuido!"