Se usa para quejarse o mostrar indignación cuando pasa algo que parece increíble, injusto o muy molesto. Es como decir: 'no me lo puedo creer, qué cara tienen'.
"Me han subido el alquiler 200 pavos y encima el casero dice que es 'precio amigo'... manda huevos"
Se usa sarcásticamente para referirse a un esfuerzo monumental solo para lograr una tontería.
"Me he tirado toda la tarde intentando abrir ese bote de pepinillos, y al final veo que era girando al otro lado. ¡Manda huevos, macho!"
Se utiliza para criticar amistosamente cuando alguien hace una pausa interminable mientras cuenta una historia poca cosa como si fuera la novela del siglo.
"Estaba Juan en el bar contando lo de su verruga en el pie, hizo más pausas que un propio discurso aburrido. ¡Manda huevos con el cuentista!"
Se usa para expresar resignación ante eventos cotidianos que nunca cambian, como el mal tiempo en días importantes.
"¡Otra vez llueve justo el día de la barbacoa! ¡Manda huevos, parece una mala película andaluza!"
Se utiliza cuando alguien hace un escándalo por algo realmente trivial, como si fuese el fin del mundo.
"Mi vecino ha llamado a la policía porque mi gato ronroneaba demasiado fuerte. ¡Manda huevos, gente exagerada!"
Se usa para expresar incredulidad cuando una solución sencilla estaba frente a las narices y nadie la había advertido.
"He estado buscando mis gafas por media casa y resulta que las llevaba puestas. ¡Manda huevos, vaya tela de despistao!"
Se utiliza con ironía para expresar sorpresa o indignación ante algo que no cumple las expectativas.
"El jefe prometió un aumento de sueldo, pero al final solo nos dio más trabajo. ¡Manda huevos con sus promesas!"