En Puerto Rico se usa para esa persona que quiere estar en todos lados, que se mete en cada corrillo y no se pierde un chisme ni aunque llueva. Es el típico que se pega donde ve bulla, fiesta o drama, aunque nadie lo haya invitado. Y hay que admitir que a veces hace gracia verlo aparecer como si fuera parte del decorado.
"Mira a Luis, qué lamparón, no lo invitamos al jangueo y ya está aquí metido preguntando qué bochinche hay."