Se usa para hablar de alguien que anda sobravo, con demasiada confianza en sí mismo, como si tuviera pase libre para todo y nada le fuera a salir mal. Es como caminar inflado, creyéndose con derecho a hacer lo que quiera sin consecuencias. Y sí, a veces da risa, pero otras dan ganas de bajarlo de la nube.
"Mira al Juanca llegando tarde todos los días a la pega, pidiendo favores y reclamando encima, anda con piure el compadre, parece que fuera dueño de la cuestión."