Se usa para decir que alguien está colgado, distraído o en su mundo, como si estuviera escuchando un sermón larguísimo y no registrara nada de lo que pasa alrededor. Es la típica frase que te tiran cuando te quedás mirando la nada misma. Y hay que admitir que describe bastante bien esos viajes mentales.
"Che, Juan, te acabo de preguntar si venís al asado y nada, estás en misa mirando la pared como si vieras la cordillera moverse."
Expresión utilizada para describir a alguien que está distraído o no se entera de lo que sucede a su alrededor.
"Oye, Juanito, ¡deja de estar en misa y échame una mano con estas cajas!"