En Corrientes embicharse es meterse en un lío feo, quedar enredado en un asunto chusco o en una situación incómoda de la que es difícil zafar. Puede ser por chusma, por calentón o por metido, pero el resultado es el mismo: quedás pegado al bardo y después cuesta un huevo desarmar todo el embrollo.
"Te dije que no te metas con la vecina casada y mirá, ahora te embichaste mal y el barrio entero está chusmeando el quilombo que armaste."
Ponerse muy ansioso o nervioso por un partido de fútbol, hasta el punto de parecer que te picaron todas las hormigas del barrio.
"El domingo me embiché tanto en el clásico que terminé gritándole al televisor como un loco."