Acción de vigilar algo o a alguien con mucha atención, como si fueras un halcón salvadoreño controlando su presa.
"Hey bicho, ¿puedes echarle el ojo a la cleta mientras voy al pupusódromo?"
Cuando alguien ve algo que le interesa mucho y ya está planeando cómo conseguirlo. Para cosas como esa chamarra de mezclilla chida o ese crush que tienes bien vigilado.
"Ya le eché el ojo a esa bicicleta en la tienda, nomás caiga la quincena y es mía."
Cuando alguien ve algo o a alguien que le gusta mucho y ya lo tiene en la mira para conseguirlo o conquistar.
"Güey, ya le eché el ojo a la nueva taquería del centro. Dicen que sus tacos son mortales. ¡Vamos mañana!"
Es cuando ves algo (o alguien) que te late cañón y no puedes dejar de pensar en ello. Como decirle 'me gustas, pero desde lejos'.
"Eh compa, ya le eché el ojo al itacate gigante del mercadito; mañana me lo aviento seguro."
Se usa cuando alguien se fija en algo o en alguien con intención, no solo por mirar de pasada. Puede ser porque le gusta románticamente, porque quiere comprarlo o porque está pendiente para no perderle la pista. Es como marcar objetivo en la mira, pero en versión cotidiana y sin tanta película de acción.
"Ese man lleva rato echándole el ojo a la moto del vecino, fijo que apenas le paguen la prima se la quiere comprar de una."
Ponerse en modo Sherlock Holmes para ver si alguien o algo merece la pena. Puede ser desde espiar al crush hasta vigilar que nadie se robe las tortillas.
"Ando echándole el ojo a la nueva vecina cada que sale a sacar la basura."
Frase coloquial para mostrar interés en alguien o algo, ya sea de manera chismosa o romántica.
"En la feria de San Marcos, Pedro le echó el ojo a esa muchacha que vendía los churros."