Se usa para decir que alguien anda lleno de dramas, puro show y cuento, como si estuviera actuando en una teleserie eterna. Es la típica persona que exagera todo, busca atención y convierte cualquier detalle en escándalo. No es un cumplido, pero hay que admitir que a veces el cahuín que arman igual entretiene caleta.
"Pucha, la Claudia anda en el teatro otra vez, terminó con el pololo por WhatsApp y se puso a llorar a gritos en el pasillo del liceo pa' que todo el curso cachara."