Expresión norteña para decir que alguien anda sin un quinto, bien tronado de lana y batallando para completar hasta lo básico. Se usa cuando traes la cartera más flaca que un taco sin carne y andas haciendo malabares con la quincena. Es una forma medio chusca de aceptar que andas en la vil pobreza, pero con humor.
"Compadre, ando tan cascabeleando que si me invitan a las cheves tengo que llevar vaso propio porque ni para el chesco traigo."