Se usa en Colima para decir que alguien se va a comer un buen plato de pozole, bien servido y con toda la hambre del mundo, casi como un ritual después de la desvelada. No es solo comer, es ir con toda la banda a curarse la cruda con pozole bien cargado. Y la neta, suena delicioso.
"Traigo la cruda bien maciza, al rato que salga de la chamba me voy a encargar el pozolazo con los compas allá en la esquina de la iglesia."