En Neuquén se usa para hablar de salir de joda fuerte, de esas noches largas donde terminás más rayado que un disco viejo. Viene de la onda de los vinilos, que giran y giran como vos dando vueltas por los boliches. Es como decir que te fuiste de fiesta sin freno, hasta que amanece y el cuerpo pide cama.
"Boludo, el sábado vinileamos tan duro por el centro que terminé cantando cumbia con el tachero y al otro día no sabía si estaba en Neuquén o en la estratósfera."