Se usa para hablar de esa persona que no para de darle a la lengua, que se manda historias eternas, medio inventadas, y siempre tiene algo más que agregar. Es como un cuentero en versión maratón, que te agota pero igual a veces te hace reír. Ideal para describir al típico personaje del barrio que nunca se queda corto de tema.
"Oye, no sientes al Pepe al lado mío en el asado, que el loco es terrible tiralengua y después no me puedo ni servir la ensalada de tanto escucharle sus historias del colegio."
Se usa para señalar a esa persona que no aguanta nada en la boca, le sueltas un chisme y al rato ya lo sabe hasta el perro del vecino. Es como un loro sin filtro, cero discreción y cero paciencia. Ideal para que nunca le cuentes nada serio, a menos que quieras que el secreto haga tour por todo el barrio.
"No le digas nada a Pedro del viaje sorpresa, que ese tiralengua al rato se lo cuenta hasta al chofer de la lancha camino al caño"