Expresión costeña para decir que algo está exageradamente bueno, brutal, de esos planes que uno recuerda por años. Se usa para comida, fiestas, rumbas o cualquier cosa que esté tan sabrosa o tan divertida que uno queda vuelto nada. Es como decir que la vaina se salió del mapa, y la verdad suena delicioso hasta decirlo.
"Hermano, esa mojarra frita con patacón y suero estaba tanto palito que casi me chupo hasta los dedos de los pies, quedé listo pa’ la hamaca todo el día."