En Bolívar sobarse es tirarse en la hamaca a perder el tiempo con gusto, sin apuro y sin remordimientos. Es dejar que el calor, la brisa y la flojera hagan su trabajo mientras uno se medio duerme y medio sueña. Básicamente es dedicarse al sagrado arte de no hacer nada, que honestamente es un planazo.
"Hoy no cuenten conmigo para nada, voy a sobarme en la hamaca todo el día viendo las nubes pasar y esperando que me traigan un cafecito con arepitas recién hechas."