Verbo inventado y medio en broma para describir ese momento crítico en que, después de un día largo y helado, decides refugiarte en un bar para entrar en calor por dentro y por fuera. Es ir a tomar unas birras con la banda para que el cuerpo se acomode, la cabeza se relaje y el sistema vuelva a funcionar. Y la verdad, suena bastante científico.
"Che, después de caminar todo el día con este viento fueguino que te vuela hasta las ideas, yo ya necesito sistemar fuerte con unas birras y unas papas fritas en el bar de la esquina."