Forma muy coloquial y cariñosa de referirse a una cerveza en Bogotá y en buena parte de Colombia. Se usa cuando estás en plan relajado con los panas, armando parche, hablando bobadas y bajando el calor con algo bien frío. Es de esas palabras que ya te ponen en modo fiesta solo de escucharla, casi que se siente el destape de la botella.
"Parce, caiga al parque con los panas que ya montamos el parche y tenemos la neverita llena de pola bien fría pa' bajar la sed después de ese camello tan berraco."
En Colombia se usa pola para referirse a una cerveza, casi siempre en plan relajado con los panas, en la tienda de la esquina o viendo el partido. Es una palabra muy de parche, de sentarse a hablar mierda un buen rato mientras se baja el calor. Y hay que admitir que suena bastante más simpático que decir simplemente cerveza.
"Parce, se acabó la jornada, caigamos a la esquina a echarnos unas polas bien frías y a rajar del jefe un ratico."
Forma muy rola y bien bogotana de decir cerveza, casi siempre fría y bien recibida después de camellar todo el día o de aguantar trancón eterno. Se usa entre parceros para invitar a relajarse, ver el partido o simplemente chismosear un rato. Es tan común que si dices cerveza en vez de pola hasta suenas todo serio.
"Parce, se acabó la jornada y Millos juega ahorita, ¿qué? ¿Nos bajamos por unas polas a la tienda antes de que se llene esa vuelta?"
Forma popular y cariñosa de referirse a una cerveza, normalmente bien fría y bien merecida después de un día largo. Se usa mucho entre amigos cuando se arma el plan de barrio, la charla en la esquina o la reunión improvisada. Es de esas palabras que ya te dan sed solo de oírlas, y la verdad es que tiene bastante encanto.
"Parce, se acabó la jornada, apaguemos todo y caigamos donde Don Jairo a echarnos unas polas bien heladas antes de que empiece el aguacero."