Frase muy regia que se usa cuando alguien prende cañón el ambiente y de repente todo mundo se le junta. Es como volverse el imán de la fiesta, el que trae la risa, la música y el desmadre rico. No es solo caer bien, es lograr que el grupo se compacte alrededor de esa persona. Y la neta, cuando alguien pega la masa, se nota.
"Llegó la Gaby con la bocina, puso cumbias bien sabrosas y en cinco minutos ya había pegado la masa, hasta el tío más amargado andaba bailando a gusto con todos."