En Canarias, cuando alguien dice papa no habla de tu padre, sino de la patata de toda la vida. Es la palabra de batalla para casi cualquier plato casero: papas arrugadas, papas con carne, papas fritas… Y hay que admitir que suena mucho más sabroso que patata, la verdad.
"Chacho, trae más papas pa’ la mesa, que con este mojo picón y las birras frías esto se va a liar fino"