Expresión asturiana para decir que alguien está muy pálido, más blanco que la leche y con pinta de no haber visto el sol ni de lejos. Se usa tanto para gente que curra bajo techo como para quien sale poco de casa. Es una forma muy de la tierrina de vacilar con cariño, aunque a veces también va con un poco de preocupación.
"Uf, Laura, entre el curro en la mina y que nunca sales al prau, vienes blancu como un pote de sidra, pareces recién sacada del congelador."