Se usa para hablar del típico personaje que se hace el valiente, el bandido o el capo, pero en el fondo es puro teatro. Mucho bla bla y poca acción, todo fachada y cero peligro real. A veces da más risa que miedo, porque se nota a kilómetros que es un ñembo nomás.
"El tipo vino todo agrandado diciendo que manejaba la zona, pero cuando cayó la poli fue el primero en correr, ñembo'adre total, che ra'a."