Expresión moqueguana para decir que alguien está totalmente desorientado, sin idea de dónde está parado ni qué está pasando. Se compara a la persona con un cuy fuera de su corral, metido en la ciudad o en un lugar raro para él. Es una forma bien peruana de burlarse con cariño de la torpeza ajena, y la verdad es que suena buenaza.
"El gringo salió del terminal, se metió por el mercado, terminó en el cementerio y seguía preguntando por la playa, estaba más perdido que cuy en Moquegua, pobre causa."