En Mendoza un mangazo es una mentira bien caradura, exagerada y poco creíble, que tirás igual para ver si zafás del quilombo. Es como inventar una historia épica para justificar algo que no hiciste o para salir del paso. A veces funciona y a veces te miran con cara de no te la cree ni tu abuela.
"El Nico llegó dos horas tarde y se mandó un mangazo tremendo, dijo que lo secuestró un ovni en la rotonda del Cóndor y que lo devolvieron recién cuando se quedó sin nafta."