En Canarias, el jable es esa arena fina, clarita y suelta que se cuela por todas partes: en las chanclas, en la toalla y hasta en el bocata. Suele ser arena de origen marino o eólico, muy típica de algunas playas y zonas dunarias. Vamos, que si hay jable, hay playa guapa y solazo asegurado.
"Niño, sacude bien la toalla antes de entrar en casa, que estás dejando todo el pasillo lleno de jable y tu madre va a explotar."