En Navarra se dice que alguien está sin rabia cuando está flojo, sin ganas de nada, como apagado. No es que esté triste, es más bien que le puede la pereza y va a medio gas todo el día. Se usa mucho para vacilar a colegas que se escaquean de currar o que se tiran la tarde tirados sin mover un dedo.
"Tú, Iñaki, llevas toda la tarde en el sofá mirando al techo, estás sin rabia perdido, ni para ir a por unas cañas te levantas, vago."