Expresión puneña para decir que alguien está tan cansado, enfermo o hecho polvo que parece listo para que lo desinfecten y lo manden a dormir por siempre. Se usa mucho en tono de broma cuando ves a alguien destruido después de una chamba dura o una farra brava. Y hay que admitir que suena bien dramática y graciosa.
"Hermano, después de la fiesta patronal y de subir el cerro con banda y todo, he llegado a mi casa pa'l cloro, ni para sacarme los zapatos me ha dado el cuerpo."