Se usa para decir que alguien está apagado, sin plan, medio mustio y dejando pasar las horas sin hacer nada interesante. Es como estar ahí, consumiéndose poco a poco, igual que las uvas cuando se secan y se vuelven pasas. Suena muy de pueblo riojano de tarde larga y sofá infinito, y la verdad es que la imagen tiene bastante gracia.
"Tía, vente a la verbena esta noche, que estás todo el día en casa mirando al techo, estás de pasas que ni las uvas de la bodega de mi abuelo."