En Aragón se usa para decir que alguien está muy loco, que se le va la olla o que tiene unas ideas tan raras que dan hasta miedo. Es como decir que la cabeza le resuena más que las campanas de la basílica. No siempre es mal rollo, a veces se dice con cariño, pero deja claro que muy normal no está.
"Desde que dijo que iba a montar una granja de unicornios en medio de los Monegros, sabemos que el Javi está como un templo, pero oye, él tan pancho con su planazo"